Fundamentos terapeúticos del movimiento
- Trabajo Práctico -
La elongación axial
La elongación axial o auto-elongación, es una acción de descompresión articular, hace referencia a la realización de los ejercicios de Pilates procurando un auto-alargamiento entre la distancia de las vértebras, esto es, alargándose uno mismo sobre el eje vertical y evitando comprimir y acortar la longitud de nuestra columna vertebral.
 Es importante aclarar, que alargar la columna, no significa modificar las curvaturas fisiológicas que posee la misma, significa alargar al maximo, evitando la compresión, sin alterar estas curvaturas.
Al auto-elongar, descomprimimos cada segmento por donde pasa el eje axial. Debemos ser capaces de aplicar este alargamiento de nuestro eje en las diferentes posturas y movimientos durante la clase de Pilates.
La elongación axial disminuye las fuerzas compresivas sobre los discos, en especial si existen patologías discales, por eso es importante mantener la auto-elongaciónl en todos los planos del movimiento, independientemente de si la columna está en movimiento o estática.
Además, es importante tener en cuenta que la elongación axial, coloca al cuerpo en su posición óptima para lograr una mayor y mejor articulación segmental de la columna en todos los planos.
"Elongación Axial, significa estirar al máximo nuestra columna vertebral, generando una acción de auto-crecimiento,
sin modificar las curvaturas fisiológicas,
es una acción de descompresión conciente." |
Para una buena postura se requieren tres condiciones:
1) Todos los "espacios articulares" deben sufrir una compresión mínima en condiciones normales, es decir, el cuerpo debe tener la capacidad de estirarse completamente sin perder las curvaturas fisiológicas.
2) Todas las articulaciones deben disponer de su plena amplitud natural de movimiento.
3) Las tensiones musculares naturales en torno a toda articulación deben estar más o menos compensadas a fin de mantener centrado su peso. Si despojáramos al esqueleto de todos los músculos, ligamentos y tejidos blandos, dejando nada más que los huesos, éstos encajarían perfectamente. El cuerpo está natural y mecánicamente diseñado para autoajustarse con un mínimo de tensión, rozamiento y resistencia entre sus partes. Son los músculos lo que los deforman, inhiben y agarrotan la estructura.
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